Los vehículos industriales, entre los que destacamos los camiones de grandes dimensiones y los autobuses, utilizan el sistema de frenado de freno por aire comprimido. Este sistema se basa en la liberación de la presión de aire almacenado en varios tanques mediante la pisada del freno. Como resultado, el aire pasa desde la válvulas hacia las cámaras de freno que empujaran los reguladores de freno y estos harán lo mismo con las zapatas de freno en los tambores, activando la detención de las ruedas.