Un estudio realizado por la DGT, muestra que el 42% de los accidentes de tráfico se producen por la noche. Debemos de tener en cuenta que nuestra capacidad visual se disminuye drásticamente al conducir de noche, el 90% de la información que obtenemos al circular la recabamos por la vista.
Además, nuestro celebro tiene que esforzarse más debido a la poca luminosidad mientras conducimos, lo que puede provocar fatiga y mareos. Dicho esto, existen una serie de consejos que podemos seguir para mejorar nuestra conducción nocturna y así poder desplazarnos a cualquier hora de una forma segura y cómoda.